Es la mejor época para ver los borreguiles de Sierra Nevada, un ecosistema único limitado a pocas semanas y lleno de endemismos de la zona. Cuando viene el deshielo, suben las temperaturas y antes de que el infernal calor lo agoste todo florece esta maravilla que hasta que no la ves no te crees que haya esto en un entorno tan seco. Y de paso te haces varios tresmiles de la zona.
[+] click para ampliar Refugio de Peña Partida a 1900 m. |
[+] click para ampliar Puntal de los Cuartos a 3150 m. |
[+] click para ampliar Borreguiles |
[+] click para ampliar Un oasis en el desierto, borreguiles |
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Este sábado 28 VÃctor, Fernando y yo nos hemos acercado a los Lavaderos de la Reina. Hemos salido a las 7 de la mañana de Motril y tras llegar a Güejar Sierra hemos tomado una de las carreteras secundarias que bajan hasta el rÃo Maitena. Tras cruzarlo comienza una pista forestal poco transitable para vehÃculos no todoterrenos y a través de la loma de la cuna de los cuartos nos adentra en la loma del Cerro Papeles. Llega un momento que hay una valla que impide el tráfico rodado a través de la pista por ser Parque Nacional. Estamos a 1900 m. de altitud. Es el momento de echarnos crema protectora al salirnos un dÃa claro y despejado. Cogemos las mochilas, gafas de sol y comenzamos por una vereda que acaba en el refugio de Peña Partida a desentumecer la musculatura. Tardamos 1h y 5 min. en ponernos en el refugio. Tras el breve refrigerio retomamos la senda que nos va a llevar a la parte sur de los Lavaderos de la Reina. No bajamos a ellos sino que seguimos por la loma de los cuartos en constante ascenso hasta alcanzar el puntal de los cuartos (3152m). Los últimos 300m son tremendos, se sube por una cresta de enormes bloques de roca con gran desnivel. Ya en el pico se toma la cuerda de los tresmiles y con sus descensos y ascensos correspondientes vamos hoyando los Cervatillos (3113m), el Puntal de Juntillas (3140m), y por último el Picón de Jérez (3088m). A este último 3000 llegué en solitario pues mis compañeros se hartaron de andar sobre esquistos y cuarcitas con gran monotonÃa salvo algún nevero que aún quedaba en ambas vertientes de la cresta. Desde ésta se veÃan a mano izquierda los Lagunillos de la Reina y a mano derecha la Lagunilla de la Mojonera y las dos Lagunas de Juntillas. A las dos y cuarto tras haber descansado unos minutos en el Picón de Jérez me dejé caer por una interminable ladera que era un continuo pedregal sin vereda alguna hasta que llegué a la cabecera de los Lavaderos de la Reina donde me reunà con Fernando y con VÃctor.
Esto fue lo realmente duro del dÃa porque a partir de aquà comenzó un espectáculo para los sentidos con los mejores borreguiles que yo haya visto en Sierra Nevada. Este es un pequeño rincón de difÃcil acceso porque la pista no es muy transitable pero merece la pena hacer el esfuerzo de llegar al mismo para encontrarte con pastizales, borreguiles que son auténticos campos de golf, con lagunas y un interminable número de caudales de agua que van confluyendo en un hermoso cauce que antes de ser canalizado para el riego de los numerosos cerezos que a estas alturas empiezan a cargarse de frutos. En su devenir el curso de agua hace preciosas cascadas rodeadas de intenso verdor salpicado de flores que sólo vamos a poder ver durante unos dÃas o a lo sumo unas semanas en estos ecosistemas borreguiles de Sierra Nevada.
Según me dicen mis compañeros hay una enorme disminución del caudal con respecto al año pasado debido a la falta de precipitaciones. De hecho la nieve apenas se reduce a cuatro manchas en toda la zona norte de la sierra. La floración aún siendo espectacular es mucho menos intensa de lo habido en años anteriores. Vimos dos especies de gencianas, dos especies de violetas, la PinguÃcola (planta carnÃvora) la Drava, Botón de Oro entre otras?, la mayor parte de ellas endémicas de nuestra tierra.
Para volver al coche tomamos una pista bajo la cual iba soterrada la canalización de las aguas de los Lavaderos de la Reina de unos 11 Km. de longitud que, a estas alturas, ya se nos hizo un poco pesada.
Esta ha sido una salida francamente bonita porque hemos disfrutado de un verdadero edén del Parque Natural de Sierra Nevada que es posible ver muy pocos dÃas al año en las condiciones que lo hemos visto. Además es un verdadero logro a nivel personal haber pateado cuatro tresmiles en un solo dÃa.